Cuando ya no sea…

cuando yo no esté

 

Soñé que dejaba de respirar, y lo que podría resultar algo triste o angustiante, se convirtió en la inspiración al post más positivo que jamás he escrito.

Mi Xavito reclamaba las instrucciones para continuar y yo le decía que estaban en la biblioteca, dentro de la biografía de Simone de Beauvoir, entre esos puntos, imagino que le diría:

‘Siempre fuiste un llorón y hoy no va a ser menos, decirte que me encontrarás en alguna parte sería andar con mentiras, ambos sabemos que hoy me convierto en polvo, del invisible, del que tirarás en el mar y cualquier día andará por la montaña.

Sabes que soy una mandona y no me puedo ir sin dictar algunas nuevas leyes que tendrás la obligación (risas) de cumplir a partir de ahora.

Tienes una hermosa playa que espera que tus pies hagan música con sus piedras cada mañana, no dejes de componer melodías matutinas, no dejes de ser feliz.

El amor, nuestro amor, a partir de este mismo minuto hará un proceso del alquimia que transformará sentimientos en recuerdos. No entristezcas, comienza a disfrutar de cosas nuevas, con las mismas ganas, con la misma respiración.

A tu corazón mantenle las llaves lejos, déjalo abierto, que entre más amor, recuerda que tenemos esperanza y ganas de que el mundo cambie, así que alguien más tendrá que experimentar lo que es vivir jugando, tú lo aprendiste y ahora te toca dar clases ad honorem. Las manos siempre como nidos y los ojos lavados con agua de manantiales transparentes, para ver nítido, el amor se ve.

Prueba soltar a volar los calcetines y los calzoncillos cada noche y dales pista de aterrizaje en el suelo, ese es un punto fundamental para analizar «a la nueva», si se irrita no pasa nada, es una reacción normal, si después de eso también lanza las suyas, ¡es esa, la has encontrado!.

Los animales son una de las claves de tu bienestar, sigue aprendiendo de ellos, bebe cuando tengas sed y descansa cuando el cuerpo te lo pida. Cuando llegue la gente que te quiere a casa muéveles el culete y ahógalos de un abrazo (lo de lamerles la cara NO), para que sepan que aunque no los invites seguido, siempre son bienvenidos.

Tocarás la guitarra y me recordarás, sonará tu teléfono y querrás escuchar que te diga «Xavitoooooooo, te suena el móvil!», ese será el momento de un nuevo aprendizaje, será la hora de estrenar un nuevo repertorio y conseguir una nueva secretaria.

En tu nueva vida recuerda que tienes que ir de compras, necesitarás un traje de tela «contracaídas» para que te ayude a recuperarte y te proteja. Si te ves falto de ternura, recuerda que está siempre al lado de la torre de corazones, con la ternura se curan los gorriones sin alas y se consiguen carcajadas en los niños. No te olvides de hacerte de unos cuantos sobres de cariño, para los que te quieran y los que no, los que no te quieren no son malos, solo les faltan abrazos.

Recuerda que puedes hacer que tu corazón invente cosas bellas y cuando lo lastime una púa, sepas que detrás de la espinilla está el maravilloso nacimiento de un pimpollo.

No sé por qué sigo teniendo la sensación de que necesitas un monográfico de la vida, si tú eres quien me ha enseñado gran parte de la colección de «Saber vivir», así que ya me dejo de susurros y me voy a volar’.

4 pensamientos en “Cuando ya no sea…

  1. Muy bonito. Siempre sabes encontrar las palabras justas, para arrancarnos una sonrisa por lo mucho que se parece a lo que nos gustaría pensar y ser, y lo bien expresado.

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